El nuestro es amor de verdad, eterno, sin tiempo ni edad
se balancea en busca de equilibrio
hoy, no es específicamente el día de encontrarlo
siento mi pecho abierto, cual libro sagrado en tiempos de crisis.
Gotas hinchadas de tristeza se cuelan
la sal no da sabor esta vez
el silencio a callado y tu voz se vuelve melodía
tu energía revela la dulzura en tu piel.
Siento, creo y deseo prospero el futuro
encontrarnos luego al otro lado del muro
brillando ambos con luz propia
sabiendo más de lo que el otro ignora.
Cuerpo, mente y emoción desean mis sueños hechos verdad...
soy una premonición, tú la superstición...
habito mi habitación modificando hábitos
habitas mi corazón y el hábito de amarte no se modificará...
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